METÍ
al fantasma en prisión por carecer de papeles para andar asustando. El pobre
era tan viejo que le ahorré los grilletes a cambio de que no se fugase a través
de las paredes. Esa misma noche me avisaron de la comisaría que Lady Macbeth
estaba indignadísima: el fantasma había vuelto al castillo. «Ya va a ver ese
mentiroso cuando le ponga las manos encima», refunfuñé mientras abandonaba el
lecho.
Por
desgracia, dado que los sonámbulos suelen esfumarse para siempre, tuve que
negarme a despertar al fantasma y aceptar calmadamente la serie de epítetos que
me endosó la dama.
13 comentarios:
Al contrario que ese fantasma, tu micro no se escapa: cada frase está perfectamente engarzada con la siguiente, y tiene una densidad ineludible.
Gracias por las sonrisas (aunque no quisiera estar junto a esa lady Mcbeth enfadada...).
Tampoco hubieran servido los grilletes, Lady Macbeth vivirá por siempre atormentada por viejos fantasmas.
Me encantó el micro.
Saludos!
Un fantasma bastante huidizo al que no se puede retener ni con grilletes, ni con promesas.
Me gusta el orden de tu narración y a Lady Macbeth me la esperaba con las manos ensangrentadas y una sábana blanca a sus pies. ¡Cosas de mi imaginación!, claro.
Buen micro Gabriel,
me ha gustado. Besos desde mis palabras.
Oh, lady McBeth debe insultar con insuperables crueldad y categoría :D
Pobre fantasma, se lo va a perder.
Un beso
Divertido e ingenioso, como suele ser marca de la casa. ¡Felicidades!
Excelente, buena sábana cobija a este micro fantasmagórico.
Susana, Ana, Laura, Alma, Francisco y Belkys (qué bueno volver a verte por aquí), ¡gracias! Me alegra que les haya gustado.
Saludos cordiales
Mucha miga veo en tu relato y mucho intertexto. Buenísimo, como siempre es marca de la casa. HOy que me han regalado una hora (gratis no debe ser, pero se me escapa el motivo) he vuelto a pasar por la casa de muchos amigos, sin olvidar tu elefante funambulista. NUnca decepcionas, desde luego. Un abrazo.
Ay, Mar, haberlo sabido antes: si están regalando horas -aunque lo hagan porque contengan bucles- tengo una pila enorme de relojes para cargar ;)
¡Gracias y abrazos!
Me ha encantado ese viejo fantasma que conmueve hasta el punto de perdonarle los grilletes. Y lo demás. Se le perdona todo porque nos ha conquistado.
Un abrazo.
Yolanda, gracias. El Elefante está lleno de fantasmas, tantos que hasta tienen etiqueta ;)
Saludos cordiales
Muuuuuuuuuy ingenioso...
Gracias, Romina :)
Saludos cordiales
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