Se despertó sobre un mar en rojo: la hipoteca vencida, los cheques en descubierto, el telegrama de despido… Se sentía como si le hubieran taladrado la cabeza. Oyó ruidos. La luz matinal le indicó que sería la mucama. Se apartó del escritorio y marchó, tambaleándose, hasta la cocina.
“No entiendo por qué se desmayó al verme, si tan sólo le pedí una aspirina y un vaso de agua”, se quejó el hombre, mientras hacía circular un dedo por el agujero en su sien.
9 comentarios:
Jajaja, en tan pocas palabras eres capaz de expresar tanto... Siempre me quitaré el sombrero ante tus escritos.
Un fuerte abrazo.
Lo mejor que he leído en un blog últimamente, me ha encantado.
Muy bueno.
Un saludo.
Gracias Malalua, a mí también me gusta mucho como escribes tú.
Gracias Metalsaurio, pero me queda una duda: no será que es lo mejor que has leído porque haya sido lo único ;) jiji
Saludos a ambos.
En realidad no he leído tu relato, puse eso por quedar bien, jojo!
(es broma)
jajaja! Siempre consigues sorprenderme con el final de tus minis!!
Cuidado con meterse el dedo en la herida, a lo mejor se la infecta, o algo... quizás se desmayó por eso! ;)
Jaja,vale Metalsaurio.
Virginia, si la mini te sorprendió es una buena señal: significa ni más ni menos que funciona.
Saludos.
Hay gente muy sensible en el mundo. Tanta, que a veces hay que andarse con ojo.
Un buen texto.
Le agrego a mi lista de enlaces en mi blog.
Nos leemos!
El caso es que desde que vi la imagen, me rondaba una idea en la cabeza... al final he escrito una mini, y la voy a enviar a la web de Minificciones y a subir a mi Ojo.
Espero que no te moleste... si te molesta avísame, vale?
Besos
Hola Javier, gracias y bienvenido al Elefante.
Virginia ¿cómo me voy a molestar contigo?, o mejor dicho ¿por qué? Todo lo contrario, que bueno que participes. Ya voy para tu bitácora a leerte.
PD: a veces soy un poquito gruñón (sólo un poquito) pero no soy ningún ogro ;)
Saludos.
Publicar un comentario